lunes, 20 de junio de 2011

Crónica Procesión Alcalá de Henares 2011

Y la Morenita se paseó gloriosa por Alcalá
A las 18:00 horas del domingo 8 de mayo de 2011, Nuestra Señora la Santísima Virgen de la Cabeza salía de la S. e I. Catedral Magistral, con repique general de campanas, en gloriosa procesión por las calles de Alcalá de Henares.
El cortejo procesional estaba encabezado por Cruz Parroquial y Ciriales, seguido de representaciones oficiales con insignias de la Hermandad Sacramental de Nuestra Señora del Carmen, la Casa de Andalucía de la localidad y la Ilustre Cofradía de Nuestra Señora del Val, Patrona y Alcaldesa Perpetua de nuestra Ciudad. A continuación el gallardete y banderas de nuestra humilde Real Cofradía de Alcalá de Henares, seguido de un número importante de hermanos, hombres y mujeres, vestidos con los típicos trajes romeros, el Hermano Mayor de Romería, don Cristian Cerro Ramírez y acompañantes, y el paso titular de Nuestra Señora de la Cabeza, portado por su cuadrilla de anderos/as. Cerraba la procesión nuestro Capellán, don Juan Miguel Prim, y la Presidencia, además del acompañamiento musical ofrecido por la Asociación Musical Silverio Campos procedente de la localidad de Sabiote (Jaén).
La Presidencia estaba compuesta por nuestro presidente don Pedro Fernández Rapestre, el Excmo. Sr. Alcalde don Bartolomé González, los Hermanos Honoríficos don Pedro Almazán y don Francisco Torroba, así como don Jerónimo Cámara, anterior presidente de la Cofradía. A la comitiva se sumaron diversos ediles de la corporación municipal complutense y representaciones oficiales de la alcalaína Hermandad de Nuestra Señora de la Soledad Coronada, la Cofradía de Ntra. Sra. de la Cabeza de El Toboso (Toledo) y las hermandades Virgen del Rocío y Santa Veracruz de Torrejón de Ardoz. A todos ellos nuestra humilde Real Cofradía de Nuestra Señora de la Cabeza de Alcalá de Henares les traslada su más sincera gratitud y admiración.
Un año más la Virgen de la Cabeza de Alcalá de Henares ha vuelto a sorprender a los alcalaínos y devotos; esta vez con un precioso resplandor repleto de claveles blancos, signo de la pureza del amor de nuestra Madre por todos y cada uno de nosotros. A la salida, piropos, vivas a la Virgen de la Cabeza y muchas lágrimas en los ojos, síntoma de la emoción y la devoción que se impregnaba a cada paso que La Morenita daba por las calles del recorrido procesional.
En Santa Úrsula nos esperaba la Hermandad del Santísimo Cristo de la Agonía que ofreció a Nuestra Señora un precioso ramo de flores, al mismo tiempo que la cuadrilla dedicaba una marcha en agradecimiento al cariño y apoyo de esta cofradía de penitencia para con nuestra Hermandad.
Posteriormente, la Virgen se dirigió, con paso alegre de romería, hasta la sede del Excmo. Ayuntamiento de Alcalá de Henares, situado en la emblemática Plaza Cervantes. Las banderas bailaron de alegría en la puerta del Ayuntamiento, al paso de Nuestra Madre, entre vivas y gritos de la multitud de personas allí presentes. El Sr. Alcalde, en nombre de la Corporación Municipal, entregó un elegante y bonito ramo de flores a Nuestra Señora, ofrecimiento que se cerró con el rezo de una Salve.
A continuación el paso de Nuestra Señora continuó su caminar con alegría, al compás de marchas de romería, entre los piropos y vivas de sus anderas/os, los cuales entregaron a su Virgen un agradecido esfuerzo a lo largo de todo el recorrido procesional. Cada vez que se realizaba una levantá, se escucharon fuertes aplausos de todos los presentes.
Tras atravesar la plaza de la Universidad, una vez en la calle Libreros, nuestra Cofradía de la Virgen de la Cabeza se presentó ante la Hermandad de la Soledad Coronada a los sones Encarnación Coronada y Caridad del Guadalquivir, como homenaje a sus hermanos, por la colaboración y el apoyo durante todos estos años.
La Hermandad de la Soledad se encontraba formada en la puerta de la parroquia de Santa María, su sede canónica, con diversos miembros de su Junta de Gobierno, así como el Hermano Mayor, don Manuel Ruiz, e innumerables hermanos y devotos de dicha hermandad. A la llegada del paso de Nuestra Señora el fervor y la emoción era evidente por las lágrimas que se derramaron y por los abrazos entre miembros de ambas hermandades.
Tras el segundo rezo de la Salve, cumplidas las 19:30 horas, el cortejo procesional enfiló nuevamente la calle Libreros, con paso rápido y muy alegre, y la gente que se encontraba en la calle disfrutando de la procesión se iba sumando espontáneamente al cortejo procesional, siguiendo el paso de la Virgen de la Cabeza y acompañándola hasta el final del recorrido.
Ya en la calle Mayor, eje principal de la ciudad, el panorama fue impresionante. Desde el principio de la calle no se lograba ver el final debido a la multitud de participantes y espectadores. Cabe destacar que entre marcha y marcha florecían bailes por sevillanas en el cortejo que acompañaba a la Virgen, a lo que habría que sumar el cielo azul de una radiante tarde primaveral, el colorido de los estandartes, las banderas y los continuos piropos a la Virgen. Todo un ambiente de romería, de un excepcional mayo abrileño en el centro por antonomasia de la histórica ciudad complutense.
En la calle Imagen la Real Cofradía se presentó a la Venerable Hermandad y Cofradía de Nazarenos del Stmo. Cristo de la Columna y María Stma. de las Lágrimas y del Consuelo (Convento de Carmelitas Descalzas). Igualmente se saludó al Convento de las Siervas de María, algunas de cuyas hermanas se encontraban en los balcones para recibir y ver a la Virgen. Con ellas rezamos a la Virgen la tercera Salve de la procesión siendo las 20:30 horas. Sones de Encarnación Coronada y Aires de Triana para, finalmente, salir de la calle con un alegre Pasacalles Romero.
Ya en el tramo final del recorrido era impresionante el calor y el amor por la Virgen María que se respiraba en el ambiente. Los signos de devoción y fervor por Nuestra Señora de la Cabeza iban en aumento conforme se acercaba el final de la procesión. A las puertas de la Magistral, una gran cantidad de fieles y devotos esperaban nuevamente a la Virgen, a los que se sumaron todas las personas que venían acompañando el cortejo. Así se verificó el amor por La Morenita, Reina del Cielo y de la Tierra, de sus hijos de Alcalá.
Cabe destacar la presencia en la puerta de la Iglesia Magistral del Excmo. y Rvdmo. Sr. Obispo de la Diócesis de Alcalá de Henares, don Juan Antonio Reig Plá, acompañado del Vicario General, Mons. don Florentino Rueda Recuero, que recibieron a la Real Cofradía en su regreso al templo catedralicio.
A la entrada de la Virgen (21:15 horas) sonó el himno nacional para, una vez en las naves templo, disfrutar de dos últimas marchas; la primera, desde la puerta principal hasta la Capilla de Nuestra Señora del Val, donde los oficiales de la Ilustre Cofradía de la Patrona de Alcalá recibieron con su estandarte a la Virgen de la Cabeza. La segunda y última chicotá, desde la Capilla de la Virgen del Val hasta la Capilla de Nuestra Señora de la Cabeza, se realizó con los sones de Caridad de Guadalquivir, cuando se derramaron lágrimas en los ojos de todos y cada uno de sus anderos/as, lágrimas de amor, lágrimas de despedida por finalizar el privilegio de poder llevar sobre sus hombros, otro año más, al mayor de sus tesoros.
Detenido el paso se procedió a desentronizar a Nuestra Señora y, en un ambiente de gran emoción, la Santísima Virgen fue trasladada desde las andas hasta su antigua Capilla de Santa María la Rica, de manos del Capellán, Hermano Mayor de Romería, Presidente, y don Manuel Cabrera, hermano merecedor de tal distinción por su colaboración y entrega a nuestra Real Cofradía.
Una vez en su Capilla, siendo las 22:00 horas, la Santísima Virgen de la Cabeza quedó expuesta para veneración de todos los hermanos y devotos presentes, culminando la jornada con un inevitable y sentido besamanto; al mismo tiempo, doña Teresa Iglesias, Albacea de Cultos y responsable del exorno floral de la Virgen, procedía a repartir las flores de las andas entre todos los presentes.
Queremos destacar la labor realizada por el capataz don José Manuel Sánchez García y su tío don Fernando Ruano; ambos, con su bagaje y saber estar, dirigieron el paso de Nuestra Señora en su gloriosa procesión mayor del presente año 2011.